París, la ciudad ideal para ir a pasear. Mires donde mires hay algo bonito, algo que descubrir y que te sorprende. Me tiene enamorada esa ciudad. Cada vez que he ido ha sido un viaje inolvidable, divertido, fantástico. París tiene algo mágico.
Esta vez he ido con Jose, nos ha dado tiempo de andar hasta decir basta, nos ha llovido, ha hecho calor, ha hecho frío, nos han dado ataques de risa, de agotamiento, hemos alucinado con lo preciosa que aparecía París cada día. Hemos visto hasta a unos chinos de boda por el puente de Alexandre III. Mi Piti habría flipao, jijiji.
La compañía ha sido de nuevo perfecta, lo mejor es que aún nos quedan cosas que ver, así que tendremos que volver. ¿Quién se apunta?
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