Estos días no he escrito nada porque la vuelta al cole tiene un efecto sólo regular sobre mi persona, pero he decidido que ya es hora de reirme un poco, que últimamente he estado tristilla.
Hay cosas que me hacen mucha gracia, como las frases que se sueltan así, espontáneamente, sin maldad, y que dejan a alguien un poco tirado (qué mala soy, ¿no?).
Os pongo un ejemplo: estaba mi Piti pintando una de las paredes del salón con una pintura superfashion y en esto que llega mi madre. No había pasado allí ni tres minutos cuando suelta "qué fatiga me da na más de entrar en tu casa". Ya os podéis imaginar la cara de mi Piti pensando algo así como "gracias mami, me has hundido en la miseria en 0'2 segundos" y las carcajás que solté allí mismo. Claro que mi madre lo dijo por el olor a pintura, que era super fuerte, pero la cara de esa Piti fue pa partirse.
Os contaré también, por si no lo sabíais, que si coincidís con alguna embarazada, no debéis decirle nunca que está gorda, porque están muy sensibles y esa frase es una de las que más les puede doler. Bueno, pues estábamos en el departamento mis compis Diego, Reyes y yo, y le dice Diego a Reyes "uy Reyes, estás gordaaa, gorda, vamos, tan gorda como yo" y no me dio tiempo de sentir pena por él de la risa floja que me entró cuando le contestó esa Reyes to indigná "sí hijo, pero lo mío es pasajero", jajaja, me parto.
En fin, que me basta recordar momentos así pa reirme aquí sola, lo cual hace que me olvide de cosas menos agradables. Así que os invito a contarme cosas divertidas, os lo agradeceré en el alma. Besitossss, Nita.
