martes, 29 de julio de 2008

¡¡Nos vamos!!


Llegó el día D: départ!! Tenía ganas de que llegara y ya está aquí. Me voy con los deberes hechos (menos los exámenes de septiembre, pero estoy de vacas, ¿quién quiere pensar en el cole ahora?), contenta de saber que Kpayo ya está en Niger, en Zinder. Ojalá todo esté bien allí y descubras que es tu lugar...

Contenta también porque me despedí de mis amigos, he dejado a mi plantita en buenas manos, y he comido hoy con mis papis, yupi!!!

Ya os contaré qué tal el viaje, espero que lo pasemos requetebien.

Besos a todosssss, Nita.

lunes, 28 de julio de 2008

Cuestión de suerte

Últimamente, Tigress y yo hablamos bastante sobre lo que cada una considera que sea una suerte. Ayer terminé el libro que me estaba leyendo, y las últimas frases son éstas:
"A veces puede llegar a ser una suerte que nos abandonen. Mientras nos recuperamos de nuestra pérdida, podemos volver a estar con nosotros mismos."

viernes, 25 de julio de 2008

Historias


Estoy leyendo un libro de Paul Auster que en realidad no es suyo. Es el resultado de un experimeno que hizo en un programa de radio en el que colaboraba. Los oyentes podían enviar relatos y él leería los mejores en antena. Años después, ha publicado este libro que contiene más de 100 de aquellos relatos.

Yo no es que quiera compararme con P. Auster (es un genio), pero me apetece escribir una historia que escuché en la radio y que me pareció muy bonita.
Una chica fue al aeropuerto a recoger a su novio, que había pasado unos meses trabajando en Perú. La acompañaron algunos amigos, que se mostraban contentos y que llevaban cámaras de vídeo. A ella le pareció un entusiasmo excesivo, pero tampoco le extrañó de forma exagerada.
En las pantallas apareció que el vuelo de su novio ya había llegado, en unos minutos se abrieron las puertas y empezaron a salir poco a poco los pasajeros. Cada uno de ellos llevaba una flor en la mano, después de mirar unos instantes, encontraban a sus seres queridos, saludaban, y acto seguido se acercaban uno a uno a esta chica y le daban la flor. Ella no sabía qué pensar. Llegó un momento en que tenía más de 50 flores en las manos, y entonces apareció su novio, con dos docenas de rosas, la gente hizo un círculo alrededor de ellos dos, él se acercó a ella, y mirándola a los ojos le preguntó si se quería casar con él. Ella dijo que sí y todo el mundo empezó a aplaudir mientras ella al fin liberaba un poco de su emoción dando rienda suelta a las lágrimas.
El chico había hecho cómplices a sus compañeros de vuelo, incluídos los miembros de la tripulación y todo el mundo parecía compartir aquellas emociones.
Os podrá parecer cursi, pero a mí me gustó. Quizá contada por Paul Auster esta historia estaría en su libro. Besossss, Nita.

domingo, 20 de julio de 2008

¡¡LIBRE!!


A ver, la vida sigue. Adiós al pasado, que tampoco era tan bueno como yo lo recuerdo. Como diría Tigress, ¡¡¡¡a la porra hombre!!!!
Dentro de na nos vamos a Viena, Budapest y Praga, ¡¡yupi!! Tengo una mijita de estres porque salimos desde Gerona, pero nuestro avión llega a Barcelona (o al revés, no me acuerdo ahora). La cosa es que tenemos una hora y media para llegar al siguiente aeropuerto, así que no vamos a facturar (primer motivo de estres, la mini maleta que hay que hacer). Mamen nos espera a la salida del aeropuerto de Barcelona con el motor ya en marcha, como decía Tigress, igual que si acabáramos de robar un banco. Y decía Tigress que esperaba que no llevara una media en la cabeza, jaja. Me partí cuando leí eso.
Y me recordó una anécdota de nuestra infancia. Mi madre nos mandó a tender la ropa a la azotea. Yo lo estaba haciendo mientras ella iba dando carreras de aquí para allá, inquieta que era la chiquilla. Pero de pronto se paró, yo estaba tendiendo una camisa de mi padre, cuando ella me llamó tocándome el hombro. No os podéis imaginar el bote que pegué, cuando al volverme la vi con una media de mi madre en la cabeza puesta. Todavía nos reímos de aquello, aunque la verdad es que me pegó un susto de mil pares de narices y me cabreé taco, mientras ella se partía de la risa.
Ay neni, qué wenosss momentosss...

jueves, 17 de julio de 2008

África

Hoy he pasado gran parte del día con César y Antonio Herrera (Papi), dos grandes personas, misioneros ambos, enamorados de África hasta tal punto que esa tierra y su gente se convirtieron hace años en el hilo conductor de sus vidas. Les quiero y les admiro profundamente. Hoy ha sido un baño total de historias africanas, ¡¡he recordado tantas cosas que descansan en mi corazón!! Esas historias han sido de todos los colores, historias de negros, de blancos, historias tristes, de amigos que han muerto, historias hilarantes, historias de fe auténtica de los africanos en Costa de Marfil, historias de miedo... Qué bien me he sentido escuchándoles, pasaba de la risa a la sorpresa, pasando por la emoción contenida y por la ternura más auténtica.
Hemos terminado tomando un té en casa, y cuando Papi ha visto el ascensor, con llave, se me ha quedado mirando sorprendido, y me ha dicho "¿Un ascensor con llave?". Le he explicado que en una junta de vecinos hace años votamos si poner o no ascensor, salió por mayoría que sí, pero había vecinos que no estaban de acuerdo o no lo podían pagar por ser pensionistas. En principio, si hay mayoría, la minoría tiene que asumir también el coste del ascensor (por ley), pero aquí decidimos que si no querían no les íbamos a obligar, sólo los que votamos a favor lo pagaríamos, pero a cambio pondríamos una llave. Yo pensaba hasta hoy que habíamos sido bastante generosos con los pensionistas y/o parados del bloque por el hecho de no obligarles a pagarlo entre todos, pero cuando Papi terminó de escuchar mi explicación me dijo: "O sea, que habéis puesto una llave y los abuelos pensionistas no lo pueden disfrutar... ¡Qué mal estáis en Europa!"
Lo que yo os diga, estos dos son seres extraordinarios. Me siento realmente afortunada de conocerles y quererles tanto.

domingo, 13 de julio de 2008

Magdalenas


¿Que haga magdalenas?

Está bien, os vais a jartar de mis magdalenas. Va a haber un exceso de magdalenas en esta ciudad. Por las orejas os van a salir. Des madeleines, pequeño saltamontes, así se dice en gabacho.
Vivan las magdalenas. De todas formas, sólo pa por si, en caso de que no me salgan, me dejaréis pediros una receta ¿no? Eso traducido quiere decir lanzaros un SOS (socorro, o sea, salvadme).
Afu. Me pongo ahora mismo a cocinar. Asias por vuestro apoyo. Nita.

viernes, 11 de julio de 2008

Huellas


Se fue el guiri, por fin. Pero no quiero hablar de él. Quiero hablar de lo mal que me siento, estoy triste. He retrocedido en mi tímido avance. Sabía que esto podría pasar durante las vacaciones, ya se sabe, menos obligaciones, más tiempo para pensar y darle vueltas a todo. Pero es peor de lo que creía: no tengo ganas prácticamente de nada, la cosa más tonta me cuesta sangre, sudor y lágrimas, sobre todo eso, lágrimas.

Joder, es que todo me lo recuerda, absolutamente todo. No sé nada de él. No puedo evitar pensar si él pensará en mí. Tigress dice que eso no me debe importar, pero me importa, todavía me hace daño.

Ojalá hubiera una pastilla para poder dejar de sufrir, ojalá se pudieran borrar determinados recuerdos. Esto no es justo, de hecho, es una mierda.
Ojalá se borre de una vez su huella en mí.